sábado, 2 de abril de 2011

Kasimir Döner Kebab

KASIMIR DÖNER KEBAB

El chef Kasimir Isbab se sirve de ingredientes semifrescos para elaborar un manjar exquisito de forma artesanal. La variedad de platos combinados, si no excesiva, es suficiente para asombrar al hambriento paseante y darle motivos para rumiar su elección: desde los maravillosos CARNE KEBAB CON PATATAS FRITAS hasta el CARNE KEBAB CON PATATAS FRITAS Y HUEVO FRITO, y, solo para los más osados, la delicia ultracalórica CARNE KEBAB CON PATATAS FRITAS Y HUEVO FRITO Y FRANFURT.

Especializado en salsas, el “Kasimir Döner Kebab”  ofrece cuatro variedades diferentes, estupendas para tomar solas o como  complemento de alguno de sus platos. Desde las clásicas “Salsa Blanca” y “Salsa Picante” hasta una arriesgada propuesta del chef: “Salsa Blanca Picante”. Recomendabilísimo.

Mención aparte merecen los entrantes: croquetas, falaffel y patatas bravas (con el equilibrio perfecto entre crudas por dentro y quemadas por fuera) sirven de aperitivo para los apetitos más voraces.
En el apartado de bebidas, nos encontramos con una refrescante sugerencia: el vino de la casa, Ahl as-Sunnah ul-Muhammed wa'l-Jamä'ah, es el perfecto compañero de Shawarmas y Döners, con un precio muy asequible (0,75€ la copa), y que deja una suave resaca afrutada más que soportable. 

Pero vamos al tema que realmente interesa a los lectores de KEBAB ES ARTE BARCELONA: los platos principales. Y os aseguramos que, aquí, Kasimir Döner Kebab no decepciona.

Muy untuoso y fragrante, el Döner de ternera sin salsa picante y sin cebolla se toma casi sin sentir.
El Dürüm de solo carne con mucha salsa para llevar es otra magnífica entrada donde los sabores están dosificados a la perfección.  Además, Kasimir se guarda un as en la manga: cuatro servilletas en la bolsa, y otra más recubriendo debajo del  papel albal. Desde aquí aplaudimos esta sabia elección: Kasimir tiene todavía mucho que ofrecer al mundo del kebab. Bravo, Kasimir.

Este gran restaurante, en lo más profundo del barrio del Eixample, entre Tamarit y Villaroel, frente a un paraje de tarjeta postal, nos muestra las señales que nos llevan hasta el rulo de carne Kebab y avisan de que la comida asequible forma parte de su ser. Lejos de la cocina regional tradicional, su reposada cocina de autor toma productos populares –shawarma, dürüm– para “ponerlos de realce vistiéndolos con la ropa de los domingos”. Amante del buen comer, Kasimir trabaja únicamente con las pequeñas producciones de sus vecinos hortelanos, carniceros, panaderos, queseros…



VALORACIÓN
RELACIÓN CANTIDAD/PRECIO




SALSAS/DELICIOSIDAD




REGUSTO POST TREINTA MINUTOS




SALUBRIDAD/LAVABO




AMABILIDAD/AMBIENTE




ARDOR
     Gástrico: Sí
     Anal: Sí Sí
TRAGAPERRAS: No


VALORACIÓN FINAL: 
9 (MAGNÍFICO)





1 comentario:

  1. Larga vita al kebabum.

    Mi barbilla está muy seca, hace mucho que por ella no corre óleo rancio y fragante. Habrá que ir a echar un kebaf al Kasimir. O un shish-shawarma-shashlik, o lo que salga de los copones.

    Pero sólo si viene el del turbante (y su pulgar también).

    Esperando nuevas entregas de deliciosidad.

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